El Perú es un país altamente vulnerable al cambio climático, fenómeno que amenaza nuestro futuro y el  futuro de la vida en el planeta tal como lo conocemos. El cambio climático es producto de un modo de producción y consumo industrial global, partiendo de un sistema económico, político y social que no reconoce al mundo natural como un sistema del cual dependemos y somos parte. Esta forma de relacionarnos con el mundo, basada en la dominación de lo otro, también se encuentra en las raíces de la desigualdad y la fragmentación de nuestras sociedades. Abordar el problema de manera integral y desde las raíces implica una transformación desde todos los ámbitos: las relaciones interpersonales, nuestros hábitos de consumo y producción, hasta la participación política y el accionar ciudadano.

A fin de crear y sostener soluciones adecuadas a la realidad del país, y consecuentes con las raíces de la crisis actual, creemos que es fundamental generar un espacio de encuentro para que jóvenes de diversas regiones y contextos sociales podamos conocernos y trabajar juntos desde nuestros distintos ámbitos. Vivimos en un momento histórico en el cual tenemos una oportunidad para encarar las consecuencias de nuestro modo de vida actual, y revertirlas desde la raíz. Asimismo, dado a que la vigésima Conferencia de las Partes (COP 20) de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) se llevará a cabo en Lima a fines del 2014, estamos en un momento estratégico para generar una conversación más amplia que conduzca a una toma de conciencia sobre la importancia de la dimensión ambiental en nuestra sociedad y en decisiones políticas – con un enfoque en la aprobación y adecuada implementación de las Estrategias Regionales de Cambio Climático, y de una legislación nacional sobre cambio climático.

La situación actual nos llama a abrir nuestras mentes y corazones, y activarnos. Es nuestra oportunidad de impulsar el cambio, de impulsar un ¡cambio sistémico no climático!